Día Internacional de la Mujer
La democracia debe garantizar ciertos derechos de la ciudadanía, el principal de ellos la elección del gobierno que le represente para definir el futuro político de la nación. Pero al mismo tiempo, debe garantizar el desarrollo de la vida de las personas en libertad y respeto a la dignidad humana.
En nuestro país, desgraciadamente y a pesar de la legislación al respecto, existen constantes ejemplos de que este extremo no se cumple, siendo uno de ellos la desigualdad entre los géneros, que se traduce en la discriminación e infravaloración de las mujeres en diversos ámbitos de nuestra sociedad (familiar, social, laboral…).
En los últimos años, se ha producido un atraso en los avances ya conseguidos en cuanto a derechos de los ciudadanos y las ciudadanas, a causa de la mala gestión estatal, qué en los ámbitos educativo, social, laboral y sanitario, y con la pantalla de la crisis económica, ha perjudicado específicamente a las mujeres.
Será responsabilidad del nuevo gobierno que se forme próximamente, al mando de las instituciones y poderes públicos, facilitar los medios para corregir la situación y apoyar la lucha constante por la igualdad.
Pero también a las y los profesionales de la educación social nos compete velar por la consecución de estos principios desde una posición especialmente importante: nuestra participación como agentes en el proceso formativo y educativo de las personas, muchas veces en situación de desventaja precisamente por sufrir este tipo de discriminación.
En consecuencia, es un deber integrar la perspectiva de género en nuestras intervenciones socioeducativas mediante la puesta en práctica de medidas concretas. Algunas de ellas:
- La coeducación, es decir, transmitir conscientemente el mismo modelo educativo a las personas de ambos sexos.
- La utilización personal y profesionalmente de un lenguaje no sexista. Se ha acordado ya emitir todos los escritos oficiales desde el Colegio de Educadores y Educadoras Sociales de la Comunidad Valenciana en lenguaje inclusivo. La Sección Profesional de Igualdad se compromete a su revisión.
- La adaptación de los materiales, dinámicas y talleres socioeducativos, tanto para romper con la división sexual del trabajo como para incorporar referentes femeninos en los contenidos (visibilizar las aportaciones de las mujeres).
- La corresponsabilidad familiar dando especial visibilidad a los padres que ejercen una crianza activa como a la diferenciación de los usos de tiempo de mujeres y hombres, tarea esencial para la conciliación familiar, laboral y personal de todas las personas.
Normalicemos la igualdad para hacerla efectiva.
Sección Profesional de Igualdad del COEESCV
